Consumo responsable. Productos para bebés.
Muchas veces si hablamos de consumo responsable pensamos en la ropa, en las verduras, alimentos aunque podemos ser consumidores responsables en otros aspectos.
Los padres somos especialmente sensibles a todo lo que compramos para nuestros hijos, y conceptos como seguridad y productos naturales son cosas que valoramos mucho, en cambio la procedencia o las condiciones de fabricación a veces las pasamos por alto por puro desconocimiento.
Cada vez para más personas es importante la procedencia controlada de los productos que compran.
Asegurarse que las telas no se cosen en talleres de Asia en condiciones inhumanas, sino que se fabrican en la Unión Europea bajo su legislación laboral. Que los tejidos que se utilicen tengan el certificado Oeko-Text de la Unión Europea, informando al usuario que los tejidos no contienen sustancias químicas dañinas y durante su fabricación se respetan las leyes medioambientales.
Fábrica Bexa |
No solo la marca debe ser de un entorno cercano si es posible, sino sobre todo la fábrica donde se produce el producto. Muchas empresas reconocidas de puericultura y otros sectores, figuran como empresas Holandesas, Polacas o Españolas, pero toda su producción se realiza en China. Es importante que lo conozcamos y lo valoremos a la hora de decidirnos por un producto u otro.
Todos estos valores que después queremos transmitir a nuestros hijos los podemos poner en acción desde ya y convertirnos en consumidores inteligentes.
Consumir de manera responsable no es más caro como ya os explicamos, solo hay que ser selectivo y decidir que necesitamos o no, a la vez que nos preocupamos por conocer los materiales, su procedencia y el origen de la fabricación.
En Marabico creemos en la importancia de ser consumidores responsables y como poco a poco podemos cambiar el mundo cambiando nuestros hábitos de consumo.
Los cochecitos que seleccionamos cumplen con todos estos aspectos. Para nosotros es importante la procedencia controlada: visitamos anualmente las fábricas de los cochecitos en la Unión Europea, visitamos los talleres de costura, de ensamblaje, mantenemos un contacto directo con el fabricante.
No seguimos el modelo tradicional de venta (Fabricante- distribuidor europeo- distribuidor nacional - tiendas- consumidor) sino que ofrecemos nuestros productos directamente desde la fábrica. De esta manera además de evitar transportes innecesarios se abaratan considerablemente los costes sin perder nada de calidad de producto.
Nos aseguramos que los carritos tengan el Certificado Oeko-Text. Y para nosotros es importante el comercio local, buscar proveedores en empresas familiares y tener un contacto estrecho con ellos.
Decidir qué y cómo consumimos es además de una oportunidad, un derecho que podemos ejercer y que como todo acabaran imitando nuestros hijos. Solo así podemos cambiar y mejorar este mundo.
Y tu, ¿cómo practicas el consumo responsable?
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